Comarcas conquenses (Cuenca)
Precio* | Horario** | Fechas |
60€ por persona | Inicio: 08.00 - Fin: 20.30 aprox. | Sábado 15 de febrero |
Qué incluye | Qué no incluye | Especies posibles |
- Transporte en furgoneta | - Comidas | Tarro blanco, cerceta común, grulla común, flamenco común, águila imperial, águila real mochuelo europeo, aguilucho pálido, esmerejón, roquero solitario, escribano palustre, etc. |
* Grupo reducido: entre 4 - 7 participantes
** Puede sufrir modificaciones
El misterioso invierno de Cuenca
En la inmensidad de la provincia de Cuenca, un tesoro de misterios aguarda entre sus páramos y valles. Más allá de la fama que algunos lugares ostentan, se despliega un universo secreto, fascinante y desconocido. En este rincón, la crudeza del invierno envuelve con un velo de misterio a paisajes que aguardan pacientemente ser descubiertos. Cada rincón oculto se convierte en un escenario en el que la naturaleza revela sus secretos más íntimos. Aunque la provincia permanezca en gran parte en la sombra para muchos, aquellos que conocen sus rincones secretos encuentran su belleza indómita.
Aguilucho lagunero
Buitre leonado
En medio del invierno, cuando las tierras yermas parecen empezar a preparase para la primavera, florece una rica biodiversidad, ofreciendo un espectáculo sutil y encantador a aquellos dispuestos a adentrarse en el corazón de la provincia. En los labrados que rodean al Júcar se alimentan centenares de grullas y algunas se cobijan en los embalses cercanos donde la invernada de aves acuáticas vive su máximo esplendor. En los valles cerrados aguas arriba, los buitres leonados se centran en su época de cría a diferencia del resto de vecinos rupícolas. Es un momento único en el que la provincia de Cuenca revela su auténtica esencia.
Durante el primer tramo de la mañana visitaremos la comarca de la Manchuela Conquense, recorriendo los terrenos agrícolas que rodean a un gran embalse que sirve de refugio invernal para grullas, somormujos, zampullines, garzas y cormoranes. La mezcla de hábitats agrícolas, donde se mueven aves como el esmerejón, la cogujada común y el aguilucho pálido, contrasta con la invernada de aves acuáticas que se refugia en la lámina de agua. Tarro blanco, cerceta común, bandos de cuchara común e incluso anátidas más escasas como silbón europeo o ánade rabudo. Por si fuera poco, a este festín de aves se suman zampullines, fochas y garcetas que también descansan en la superficie del agua. Cada especie aporta su propia nota a la melodía del embalse.
Tras la primera visita pondremos rumbo río arriba, donde la topografía se torna salvaje. Aquí los valles tallados por las aguas dan forma a elevados escarpes y pronunciadas laderas cubiertas de vegetación creando tres ambientes bien diferenciados. La zona de ribera donde destacan aves típicas de los bosques de galería, pájaros carpinteros, carboneros, herrerillos, trepadores o agateadores. Acompañando a este ambiente se abre un escenario más vertical, el rupícola. Aquí destaca la presencia de buitre leonado, pero es posible observar también halcón peregrino, águila real o incluso águila perdicera. Entre las aves más pequeñas podremos observar roquero solitario, chova piquirroja, grajilla occidental escribano montesino o incluso con mucha suerte la collalba negra.
Nuestra última parada será la Laguna de El Hito, algo más conocida y con la imagen de las grullas al atardecer como objetivo principal. Aunque en sus aguas se observa también una saludable e interesante comunidad de aves acuáticas similares a las observadas por la mañana. En cambio, las características más someras de este enclave, favorecen la presencia de algunas limícolas como agachadizas, chorlitos dorados, combatientes, correlimos o avocetas. Es interesante buscar en sus orillas al chorlitejo patinegro, ya que se trata de una especie que se ha reproducido en este espacio en otros años. También se concentran gaviotas e incluso hay posibilidades de observar flamencos en función de la extensión de agua que inunde los cultivos.
Escribano palustre
Después de un día explorando los secretos de las comarcas conquenses, habremos descubierto muchos de sus rincones y nos habremos deleitado con sus habitantes alados más curiosos. Sin duda, la verdadera magia reside en haber sido testigos de este espectáculo en el corazón de un lugar enigmático y aún por descubrir.
Detalles y recomendaciones
- Calzado y ropa apropiados para la época.
- Material óptico.
- Llevar agua y algo de comer para el viaje.
- Consultar la meteorología.
- Leer detenidamente la información de la excursión.
- Las reservas deben hacerse al menos con 7 días de antelación.
Grullas en la Laguna de El Hito
Tlfn: (+34) 690 73 36 91